La elección del calzado es fundamental en el desarrollo saludable de los pies de los niños. ¿Sabías que el uso de un calzado inadecuado puede provocarle problemas de salud? Aquí te contamos cuáles son los problemas de salud que pueden surgir a causa de un mal calzado. Verás cómo las diferentes características puedes o no afectar a la salud de los pies.
1. Dedos aprisionados
Uno de los problemas más comunes asociados con el uso de calzado inapropiado es la compresión de los dedos. Los zapatos que son demasiado estrechos o que tienen una puntera puntiaguda pueden causar que los dedos se aprieten, lo que a largo plazo puede conducir a condiciones como los juanetes, los dedos en garra o la onicomicosis (infección por hongos en las uñas).
Un estudio publicado en el Journal of Foot and Ankle Research señala que el uso prolongado de calzado que no permite una adecuada movilidad de los dedos puede causar deformidades estructurales. Los niños pueden experimentar dolor y molestias, lo que puede afectar su capacidad para jugar y participar en actividades físicas.
Ejemplo de calzado con puntera estrecha:
2. Calzado con tacón o drop
El «drop» se refiere a la diferencia de altura entre el talón y la punta del zapato. Los zapatos con un drop elevado pueden alterar la forma en que los niños caminan, impactando su postura y, por ende, su salud general. Un drop excesivo puede provocar un mayor estrés en las articulaciones, especialmente en las rodillas y la cadera.
Investigaciones indican que el uso de calzado con un drop elevado se asocia con una mayor incidencia de lesiones por uso excesivo, como la tendinitis rotuliana. La Academia Americana de Pediatría sugiere que los zapatos con una elevación mínima en el talón promueven un patrón de marcha más natural, lo que es crucial durante las etapas de crecimiento.
Ejemplo de zapato con tacón o drop:
3. Zapatos muy rígidos
Los zapatos rígidos, aunque ofrecen soporte, pueden limitar la flexibilidad necesaria para el desarrollo saludable de los pies de los niños. Este tipo de calzado puede restringir el movimiento natural de los pies, impidiendo que los músculos y ligamentos se fortalezcan adecuadamente.
La falta de flexibilidad en el calzado puede contribuir a una serie de problemas, incluyendo la debilidad muscular y el desarrollo de pie plano. Según un estudio de la International Journal of Sports Medicine, los niños que usan calzado rígido tienden a tener una mayor incidencia de problemas biomecánicos en comparación con aquellos que usan calzado más flexible.
Ejemplo de un calzado rígido:
Consulta a un especialista: Si notas problemas en los pies de tu hijo, no dudes en consultar a un podólogo especializado en pediatría para obtener una evaluación adecuada.
